Marchitando poco a poco...

Una rosa marchita, que nos puede dar muchas interpretaciones, muchas ideas de qué significa...

Un botón de rosa, un genesis de algo que sería hermoso, una rosa que abriría totalmente y sería muy linda... cuando estaba a medio abrir algo hizo que su tallo se fracturara y comenzara a secarse, luego, esa fractura se reparó en parte, seguía el desarrollo de la flor, pero pasado un corto tiempo, la fractura volvió a ceder y la flor comenzó a marchitarse... sus demás amigas rosas la dejaron de lado, ella era distinta, no era como las demás, no encajaba en el grupo, quizás algunas similitudes, tenía petalos, tallo y espinas, igual que todas las demás, pero esos petalos no eran igual a los del resto, estaban de otro color, estaban secos... el tallo, no era un tallo verde, fuerte que mantenía erguida la flor, era un tallo que poco a poco oscurecía y tenía menos para sostener la flor, las espinas tampoco eran iguales, se veían muy fuertes, pero al momento en que era necesario utilizarlas, no cumplian su función, se doblaban, se quebraban, pero no protegían a la flor...

Esta rosa, al sentirse distinta, prefirió alejarse de todas las demás, no quería estar en un lugar donde no encajaba, prefería estar sola que con flores que no les gustaba, se apartó del grupo, y continuó su proceso de marchitación en completa soledad, de vez en cuando una que otra rosa se compadecía y la iba a ver, pero eran sólo cosas pasajeras, nadie la acompañó en lo que le quedó de vida, ella ya no se atormenta por eso, lo asume, y cuando ve que viene alguna flor a visitarla no se crea esperanzas de compañía permanente, sabe que la soledad es lo que le corresponde, completar su marchitación para así concluir el ciclo.