sábado, 20 de diciembre de 2008

Renacer...

20 años viviendo solo, rodeado de gente, pero desarrollando mi vida en soledad, con miedo a confiar en la gente, con miedo a cometer errores, siempre fui perfeccionista, me gusta hacer las cosas bien y evitar equivocarme, o por evitar que otros se equivocaran, trabajaba solo...

Hubo veces que logré confiar en alguien, que logré romper la dura cáscara que me envolvía y dejar entrar a alguien, lamentablemente traicionaba esa confianza y me hacía dudar de confiar en la gente, me hacía sentir que sólo tenía gente cerca porque buscaban algún beneficio de mí.

Por 20 años me relacioné con el mundo pero no dejé al mundo entrar en mí, me mantenía aislado, encerrado en un submundo donde reinaba la lógica sin dar paso a emociones ni sentimientos, pensando intelectualmente y no emocionalmente, como dice John Nash "doble ración de cerebro y media de corazón", todo esto me hacía ser un ente frío, duro, poco sensible. Puede haber servido algunas veces, para cumplir con responsabilidades, el exigirme a mi mismo, etc. pero qué pasó con mi interacción hacia el mundo, seguía siendo nula, el mundo seguía viendome como un ser infranqueable, difícil de llegar.

Sin darme cuenta, dañé a personas que nunca quice dañar, perdí a otras que nunca quice perder, sin darme cuenta fui quedándome solo y la lógica no explicaba lo que pasaba, claro, las emociones no tienen base lógica, son un fluir de sentimientos.

Quizás un poco tarde, pero me di cuenta de lo mal que me hacía el ser así, y más aún, lo mal que le hacía a la gente que me rodea (gente de verdad). Este año conocí gente hermosa, hicieron que me diera cuenta que el hombre es un ser de sentimientos más que de lógica, es bueno mezclarlas, pero todo extremo es malo... Ahora he intentado remediar algunos de esos errores, volvió gente que creí perdida, poco a poco aprendo a mostrarme más y mostrar lo que siento... Ahora un renacer, aprender del pasado para vivir un presente y construir un futuro.

Sólo me queda decir Gracias, a toda esa gente linda que produjo este cambio... Niños y niñas de la clínica, funcionarios de la clínica, Mi Coni que quiero tanto... Mi Amiga Sanndy y su mamá, mi familia... y mucha gente que se me viene a la mente, pero no terminaría de nombrarlos, GRACIAS.

viernes, 25 de enero de 2008

Amigos o matemátidependientes??

Desde siempre tuva esa facilidad, por lo que fui conociendo el mundo, eramos pocos, más aún cuando a los cortos 4 años, antes de conocer las letras, me presentaron los números, 10 símbolos que servían para agregar o quitar cosas...

Al comenzar los estudios formales, y comenzar a conocer más a estos símbolos comencé a tomarles gusto, encontraba que trabajarlos era simple y que con ellos se podían explicar muchas cosas, siempre me pedían ayuda y al considerarlos simples, siempre ayudaba...

Con el pasar el tiempo fui viendo que cada vez eramos menos los que sentíamos afinidad por ellos, algunos tenían facilidad, pero no sentían esa simpatía que yo si, y menos la facilidad de sin saber algunas cosas, revolver todo y de esa ensalada de ideas, sacar algo en concreto... un "igual a..." que era la respuesta...

Luego llegaron otros símbolos a mi vida, estos se escriben sobre 5 lineas... con una llave al comienzo y se interpretan en un piano, una guitarra, una flauta, etc... símbolos que la mayoría considera totalmente opuestos a los otros 10 antes mencionados, pero yo no, yo encontré similitudes, cómo cada nota encaja en una melodía, igual que un signo en una ecuación...

Siempre había gente al rededor, amigos? no sé... pero almenos estaban cerca, de vez en cuando un "explicame?", siempre accedí, me gustan los números y me gusta que la gente pueda entenderlos, y si puedo cooperar en ello, lo hago con gusto, la satisfacción de ver a alguien que primero dijo "número de la "#&&#&$" y después termina diciendo "no era tan difícil la cosa..." acompañado de una sonrisa...

Fue llegando más gente, que aparentaba estar cerca no sólo por eso, que de verdad había amistad... Con más gusto explicaba y ayudaba con mis grandes amigos, los números y las notas... nunca pedí retribuciones monetarias, cómo cobrarle a los amigos, pero creí que al menos eso ayudaría a fortalecer la amistad. Con el tiempo me di cuenta que no, que esa amistad fue fingida, o quizás fue, pero no en el mismo grado que desde acá, no hubo mayores muestras de que así fuera, al contrario, terminado el perido, nisiquiera un "gracias" al ver los resultados y más aún, un alejamiento comenzaba...

Qué se puede pensar si el teléfono sólo suena para escuchar un "¿me puedes ayudar?" y después de un largo tiempo, suena para lo mismo... y en los momentos en que se necesita de esas supuestas amistades, rara vez aparecen, y cuando lo hacen, es muy superficialmente, ¿para aparentar amistad y después poder hacer uso del "¿me puedes ayudar?" y salvar un ramo, pasar una prueba?, no sé, puede que si...

En fin... amigos o matemátidependientes? no sé, puede que alguien, de los que no hablan sólo para decir "¿me puedes ayudar?" lo sea... hasta el momento sólo grandes decepciones...

Yo seguiré con mi gusto por los números, si voy a seguir acudiendo a todos los llamados, ya con esa experiencia, lo dudo... en lección para que aprendan a no fingir amistades por conveniencia...

En muestra a esta continuación con esto, si todo sale bien, en marzo de 2008 comenzaré a ejercer como entrenador de olimpiadas de matemática en el colegio que me albergó por 6 inolvidables años... devolver en parte la mano a quien ayudó en gran parte a desarrollar esto en mi...